Juan Bautista Jordano Barea, Licenciado y Doctor en Derecho, catedrático y académico, nació en Córdoba en el año 1924 y murió en Sevilla en 2005, a la edad de 80 años. Su llegada a Sevilla en 1961 marcó un hito en la universidad, ya que asumió la vacante dejada por la muerte de don Miguel Royo Martínez, continuando así la brillante tradición de los maestros civilistas en la Universidad Hispalense.
Familia. En el ámbito familiar, Juan Bautista Jordano Barea era hijo de Diego Jordano Icardo, distinguido catedrático de Historia Natural en el Instituto Nacional de Segunda Enseñanza de Córdoba y miembro de la Real Academia de Córdoba. Su madre, Dolores Barea Cabrera, era la hija del destacado empresario José Barea Ruiz. Lamentablemente, quedó huérfano a la temprana edad de tres años. Fueron doce hermanos. Su hermano mayor, José Jordano Barea, oftalmólogo de profesión, desempeñó el papel de padre en su vida. Entre sus hijos, Francisco también se destacó como catedrático de Derecho Civil, mientras que Jesús Jordano Fraga es en la actualidad catedrático de Derecho Administrativo en la Universidad de Sevilla.
Formación. La formación académica de Jordano Barea fue excepcional. Realizó sus estudios de Licenciatura en las Universidades de Granada y Sevilla, completando su Doctorado en Derecho en la Universidad de Madrid en 1947.
Becas. Durante su carrera, obtuvo becas importantes que le permitieron ampliar sus conocimientos en su especialidad. Fue pensionado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, lo que lo llevó a las prestigiosas universidades de Coimbra y Lisboa antes de regresar a España en 1951. En 1955, recibió una nueva beca del Consejo Superior de Investigaciones Científicas para continuar sus estudios en las Universidades de Bonn y Köln.
Docencia. La docencia fue una parte fundamental de su vida. Comenzó su carrera como docente en 1951 en la Universidad de Santiago de Compostela, ascendiendo desde Ayudante de Clases Prácticas hasta Profesor Encargado de la Cátedra de Derecho Civil. En 1961, ganó la Primera Cátedra de Derecho Civil de Santiago y, poco después, ocupó la misma cátedra en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla, donde permaneció hasta su jubilación en 1989. Fue un maestro influyente y formador de notables catedráticos de Derecho Civil, incluyendo a Ángel López López, Antonio Gordillo Cañas y Luis Humberto Clavería. Tras su jubilación, más de 6000 alumnos solicitaron su nombramiento como profesor emérito, título que ostentó hasta su fallecimiento.
Investigación, Su compromiso con la investigación y la búsqueda del conocimiento fue inquebrantable. En 1959, obtuvo una beca de investigación de la Fundación "Juan March" que respaldó su labor académica.
Publicaciones y divulgación. Las contribuciones escritas del profesor Jordano Barea son un testimonio de su aguda perspicacia y claridad. Sus obras reflejan su enfoque metodológico: jurisprudencia realista, conceptualmente instrumental y al servicio de la justicia. Su obra esencial, "El testamento y su interpretación", publicada por Comares en 1999 con el ISBN 84-8151-899-9, alcanzó cinco ediciones. Entre sus otras publicaciones notables se encuentran "El Negocio Fiduciario" (1959), estudios sobre la causa y el contrato, y trabajos sobre el testamento y su interpretación.
Además de su labor académica, Jordano Barea fue miembro del Comité Científico de Redacción de la Rivista di Diritto Agrario de Firenze y colaborador honorario del Instituto Nacional de Estudios Jurídicos. También desempeñó un papel relevante como Miembro del Consejo de Redacción del Anuario de Derecho Civil y como Vocal Permanente de la Comisión de Codificación.
Academias. Su destacada trayectoria académica lo llevó a convertirse en Académico correspondiente de la Real Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba.
Premios y Honores. El reconocimiento a su labor fue inmenso.
Fue galardonado con la Medalla de Oro de la Real Academia Sevillana de Legislación y Jurisprudencia
Recibió el título de Doctor Honoris Causa por la Universidad de Córdoba.
En homenaje a su legado, todas sus obras fueron compiladas en "Escritos Jurídicos", publicado por la Fundación El Monte en 2006 con el ISBN 84-8455-215-2.
Juan Bautista Jordano Barea dejó una huella imborrable en el campo del Derecho y la academia, y su legado continúa inspirando a generaciones de juristas y estudiantes de Derecho.
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