Manuel
Chaves Nogales, periodista y escritor, nació en Sevilla en 1897
y murió en Londres en 1944, donde estaba exiliado por su pasado
republicano. Contaba con 46 años de edad.
Dos
temas fueron los que mayor impacto tuvieron en la motivación de
Chaves Nogales, que fueron , en definitiva, las dos grandes
conmociones sufridas por Europa en la primera mitad del siglo XX: la
revolución rusa y sus consecuencias y la presencia en el panorama
europeo del nazismo y el fascismo.
Familia. Era
hijo del también periodista Manuel Chaves Rey, y desde muy joven
acompañaba a su padre en sus tareas y fue aprendiendo la profesión
de periodista, en las diferentes redacciones de periódicos
sevillanos para los que escribía su padre. Estuvo casado y tuvo tres
hijas.
Periodismo. Toda
su vida la consagró al periodismo donde escribió reportajes,
crónicas, columnas, entrevistas, etc. que fueron publicados en
varios periódicos españoles de la época. Como periodista
entrevistó a reyes, presidentes de gobierno, ministros, religiosos,
artistas, toreros y deportistas.
Fue
cronista destacado de los grandes acontecimientos ocurridos en la
primera mitad del siglo XX. En Sevilla fue testigo del resurgir del
regionalismo andaluz y pudo contar a sus lectores todos los aspectos
más importantes que tuvieron lugar en la Exposición Iberoamericana
de 1929.
En
Madrid fue redactor de los periódicos “Heraldo de Madrid”,
“Ahora” y “Estampa”
Segunda
República. Durante
la Segunda República recorrió el territorio español y fue cronista
destacado de los acontecimientos más significativos de ese periodo
de tiempo tales como la ocupación de Ifni y la revolución de
Asturias. Acompañó en la visitas institucionales del Presidente y
de los ministros. Contó con la amistad y confianza de Manuel Azaña.
Y conoció la realidad europea en sus viajes por distintos países,
especialmente Alemania, Italia, Francia y Rusia.
Nazismo
y Comunismo. Como
periodista el veía en estos dos movimientos un mismo talante
antidemocrático, tendencias opuestas pero derivadas de un mismo
sentir totalitario, implacable y destructor.
El
quiso informar con la mayor ecuanimidad, alejándose de los
extremismos en la línea que defendieron Gide y Malraux respecto a la
literatura comprometida en el Primer Congreso Internacional en
defensa de la Cultura (París, 1935).
Guerra
Civil. Durante
la Guerra Civil Española (1936-1939) tuvo que salir de España por
haber defendido expresamente, desde un periódico de centro, a la
República legítimamente instaurada.
Exilio. El
exilio en Francia, antes que un fracaso, supuso la proyección
europea de su quehacer informativo. Del desenlace de la Guerra
escribió las siguientes reflexiones:
"ni
colonia fascista ni avanzada del comunismo. Ni tiranía
aristocrática, ni dictadura del proletariado. En lo interior, un
gobierno dictatorial que con las armas en la mano obligará a los
españoles a trabajar desesperadamente y a pasar hambre sin rechistar
durante veinte años, hasta que hayamos pagado la guerra. Rojo o
blanco, capitán del Ejército o comisario político, fascista o
comunista, probablemente ninguna de las dos cosas, o ambas a la vez,
el cómitre que nos hará remar a latigazos hasta salir de esta
galerna, ha de ser igualmente cruel e inhumano. En lo exterior, un
Estado fuerte colocado bajo la protección de unas naciones y la
vigilancia de otras".
En
el exilio conoció de cerca la vida política francesa al trabajar en
el Ministerio del Interior francés; colaboró en periódicos como
L´Europe Nouvelle, Candide, France Soir, realizó emisiones de radio
para España y América Latina.
Su
mujer y sus tres hijas regresaron a España en 1940 huyendo de la
invasión de Francia por las tropas alemanas y Chaves Nogales se
exilió en Londres porque se sentía perseguido por la Gestapo. Su
fallecimiento le sobrevino en Londres en 1944 cuando era aun joven y
estaba en su plenitud profesional a consecuencia de una peritonitis.
Está enterrado en esa ciudad.
Libros. Dejó
para la posteridad una amplia bibliografía destacando la biografía
de Juan Belmonte editada en 1935.
Premios. En
1927 le concedieron el premio de periodismo Mariano de Cavia
ResponderEliminarTiene un libro escrito que se titula A Sangre y Fuego, que reconocido por muchos insignes escritores, debería de enseñarse en las escuelas, y el que escribió sobre Juan Belmonte, es una obra de arte.