La biografía de la cantante y actriz Juanita Reina, puede contretarse en los siguientes términos;
Juanita Reina, cuyo nombre real era Juana Reina Castillo, nació en el barrio de La Macarena, Sevilla, en 1925, y trascendió como una extraordinaria cantante de copla y actriz. Falleció en su ciudad natal en 1999 a la edad de 73 años, dejando un legado imborrable en la música y el cine español.
Familia. En 1964, contrajo matrimonio con el renombrado bailaor de flamenco Federico Casado, apodado "Caracolillo", quien lamentablemente falleció en 2012. De esta unión nació su hijo, el periodista Federico Casado Reina.
Formación Artística. Desde temprana edad, Juanita mostró su destreza artística, aprendiendo a bailar en una academia y deleitando a su comunidad cantando en bautizos y bodas. A los trece años, debutó en el Teatro Cervantes de Sevilla interpretando la canción "María Salomé" de Estrellita Castro.
Trayectoria Artística. Guiada por su padre, Miguel Reina, quien fue su representante y empresario, Juanita debutó con éxito en el mundo del espectáculo con el montaje "Los Churrumbeles". Su primera grabación incluyó canciones de los renombrados autores Quintero, León y Quiroga. Con su espectáculo "Tabaco y Seda", presentado en el Teatro Reina Victoria de Madrid, y el aclamado "La España de monsieur Dumas", Juanita se convirtió en una de las principales estrellas de la copla en 1942, compartiendo escenario con la inigualable Lola Flores.
Cine. Su incursión en el cine comenzó en 1941 con "La Blanca Paloma" y se consolidó con películas como "La Lola se va a Los Puertos" (1947) y "Lola La Piconera" (1951).
Compromiso Social y Retiro. Aunque fue etiquetada como franquista por su presencia ante el general Franco, Juanita Reina dejó un impacto positivo en Sevilla, donde su esposo inauguró una Academia de Danza que popularizó las sevillanas a nivel mundial. Durante su madurez, tuvo actuaciones puntuales con gran éxito, destacando en programas como "Cantares" y "Las Coplas".
Legado y Reconocimientos Honoríficos. La voz maravillosa y limpia de Juanita Reina, su carácter tímido y reservado, pero rebosante de alegría, la consagraron como una de las mejores tonadilleras de todas las épocas. Su legado artístico fue premiado con innumerables reconocimientos, destacando la Medalla de Oro de Andalucía en 1992 y la distinción póstuma como hija predilecta de Sevilla. la Medalla de Plata al Mérito en el Trabajo (1975), la Medalla de Oro de Bellas Artes (1960), la Medalla de la Cruz Roja, y la distinción como Hermana de Honor y Camarera de la Virgen Esperanza Macarena.
El Ayuntamiento de Sevilla le dedicó una glorieta en el Parque de María Luisa en 1994, y en 2006, el Ayuntamiento de Málaga honró su memoria con una calle a su nombre. Su biografía fue inmortalizada por la catedrática de Literatura, María Jesús Pérez Ortiz, en el año 2006. La fundación que lleva su nombre erigió su mausoleo en el Cementerio de San Fernando mediante una suscripción popular. Juanita Reina, la suprema dama de la copla andaluza, dejó un legado eterno en la historia de la música española.
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