La biografía del eminente científico Ernesto Carmona Guzmán, que es químico, doctor, investigador, catedrático y académico, se puede concretar en los siguientes términos:
Ernesto Carmona Guzmán, nacido en Sevilla en 1948, está casado y es padre de tres hijos.
Es un personaje distinguido porque su contribución a la ciencia y la educación ha dejado una huella indeleble en la comunidad académica y científica. Su carrera abarca una amplia gama de logros y reconocimientos, y su pasión por la química lo ha llevado a ser uno de los líderes en el campo de la organometálica en España.
Formación. Carmona Guzmán comenzó su viaje académico en la Universidad de Sevilla, donde se graduó con honores en Ciencias Químicas en 1972, continuando luego para obtener su doctorado en Ciencias Químicas en 1974, también con méritos excepcionales. Su compromiso con la excelencia académica lo llevó a realizar trabajos posdoctorales en el Imperial College London, donde trabajó con el distinguido Nobel de Química, Sir Geoffrey Wilkinson, entre 1974 y 1977.
Docencia. Ernesto Carmona Guzmán dedicó una gran parte de su vida a la docencia y la investigación. Desde 1984 hasta su jubilación, fue catedrático de Química Inorgánica en la Facultad de Química de la Universidad de Sevilla. Previamente, desempeñó roles académicos en varias universidades, por ejemplo la Universidad de Córdoba. Su compromiso con la educación lo llevó a impartir conferencias y cursos en instituciones académicas de renombre en todo el mundo.
Ha supervisado y co-dirigido más de treinta y cinco tesis doctorales, dejando su marca en la formación de futuros científicos.
Investigación y Patentes. El trabajo de investigación del Profesor Carmona abarcó tanto la docencia como la labor de investigador en el Instituto de Investigaciones Químicas (IIQ-CSIC-Universidad de Sevilla). Además, tuvo el honor de formar parte del Consejo Rector del CSIC entre 1993 y 1996. Su enfoque principal estuvo en la investigación de compuestos organometálicos, lo que resultó en la obtención de patentes europeas significativas en colaboración con REPSOL.
Relevancia. Ernesto Carmona Guzmán es ampliamente reconocido como uno de los pioneros en la introducción de la organometálica en España, una rama de la química que se enfoca en las interacciones entre las moléculas orgánicas y los metales. Sus contribuciones a esta área han tenido un impacto duradero en la investigación química a nivel nacional e internacional.
Publicaciones y Divulgación. El Profesor Carmona es autor de más de 250 artículos científicos publicados en revistas especializadas, incluyendo la prestigiosa revista científica Science. Ha participado activamente en numerosos congresos científicos en España y en el extranjero, compartiendo su conocimiento y avances científicos.
Asociaciones Científicas. Además, es miembro de la Real Sociedad Española de Química, la Royal Society of Chemistry y la American Chemical Society.
Academias
Es Académico Numerario de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales.
En el año 2006 fue elegido Académico Numerario de la Real Academia Sevillana de Ciencias, con el discurso titulado: “El enlace metal-carbono en Química" que fue contestado por el académico D. José López Barneo. En 2021 es académico supernumerario de esta Academia.
Académico (Fellow) de la European Academy of Sciences
Reconocimientos y Premios. Ernesto Carmona Guzmán ha sido galardonado con una serie de premios en reconocimiento a su destacada contribución a la química y la investigación. Entre sus premios notables se encuentran el
Premio Rey Jaime I de Investigación Básica en 2010,
Premio Solvay de Investigación en Ciencias Químicas en 1991,
Premio Maimónides de Investigación Científica de la Junta de Andalucía en 1994,
Además, ha recibido medallas y reconocimientos honoríficos, como la Medalla de Oro de la Real Sociedad Española de Química y la Medalla de Plata y el Sir Geoffrey Wilkinson Lectureship de la Royal Society of Chemistry del Reino Unido.
Ernesto Carmona Guzmán ha dejado un legado perdurable en el campo de la química y la educación, y su contribución a la sociedad científica es invaluable. Su pasión, dedicación y logros continúan inspirando a generaciones futuras de científicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario